Najarinos por siempre… 25 años después

Hace un cuarto de siglo, un grupo de jóvenes llenos de sueños y esperanzas cruzamos las puertas de la Institución Educativa “Manuel Muñoz Nájar” para embarcarnos en una travesía educativa que marcaría nuestras vidas de una manera que no podríamos haber imaginado. Hoy, 25 años después, es un honor para nosotros conmemorar dos ocasiones que residen en lo más profundo de nuestra historia personal y colectiva: el XC aniversario de nuestra venerable alma mater y las bodas de plata de la promoción que lleva el nombre de nuestra escuela, en el corazón, "Najarinos por Siempre".

Nuestro querido colegio se ha mantenido como un faro de conocimiento y valores durante 90 años, enraizada en la tradición y el compromiso educativo que han dejado una huella imborrable en la ciudad de Arequipa. Durante nuestra época de secundaria, entre los años 1994 y 1998, tuvimos el privilegio de ser parte activa de esta rica historia, contribuyendo con nuestros propios recuerdos y experiencias a su legado.

El 25º aniversario de nuestra promoción, "Najarinos por Siempre", llega como un hito en nuestras vidas. A pesar de las circunstancias que nos impiden reunirnos en persona como hubiéramos deseado, el lazo inquebrantable de la amistad y el poder de la nostalgia nos conectan en un viaje al pasado, donde revivimos los momentos compartidos con una intensidad única. En especial, los compañeros del 5to C, quienes hemos caminado juntos en esta travesía, hemos compartido risas, lágrimas y recuerdos que se han mantenido intactos a lo largo de los años.

Las aulas de nuestro colegio “Manuel Muñoz Nájar” fueron testigos de nuestras risas y aprendizajes, los recreos nos brindaron la oportunidad de forjar amistades eternas, las interacciones con nuestros profesores nos dejaron valiosas lecciones de vida, los desfiles escolares nos llenaron de orgullo, y el periodismo escolar nos permitió expresar nuestras voces. En lo personal no puedo olvidar las “brigadas caceristas” o el emocionante viaje de promoción al Cusco, donde la historia cobraba vida ante nuestros ojos.

Las caminatas de regreso a casa eran un tiempo de reflexión y confianzas con amigos, los primeros amores añadieron un matiz mágico a nuestra adolescencia, la confirmación religiosa fortaleció nuestras creencias y los sueños que forjamos entonces se han convertido en las realidades que vivimos hoy en día.


Los recuerdos que atesoramos son como un tesoro inestimable que ha perdurado a lo largo del tiempo, recordándonos quiénes éramos y cómo hemos llegado a ser lo que somos hoy. La educación, la amistad y la camaradería que compartimos en nuestra institución educativa, han dejado una marca imborrable en nuestras vidas, y seguimos siendo “Najarinos por Siempre”, unidos por los lazos que nacieron en nuestras aulas y que perdurarán en nuestro corazón, por siempre.

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1 Comentarios

  1. Juan Carlos Tolentino9:10 p.m.

    Me alegra muchísimo, ver tus logros promoción, sabíamos de la calidad de estudiante y amigo que eras siempre hacia adelante. Un abrazo de tu promoción Juan Carlos Tolentino 5to C

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