miércoles, 30 de septiembre de 2015

Calendario electoral de las izquierdas peruanas

El calendario electoral de las izquierdas

Escribe: Antonio Zapata

El próximo fin de semana son las elecciones internas del Frente Amplio, FA, dando inicio al calendario electoral de las izquierdas. Aunque hay precandidatos para variados gustos, las preferencias están entre Vero Mendoza de Sembrar y Marco Arana de Tierra y Libertad. Por su parte, el otro agrupamiento de izquierda, denominado “Únete por otra Democracia” nuevamente atraviesa tensiones con Yehude Simon. A este panorama hay que sumarle la dinámica de grupos que se manejan libremente, como el BNP, que cuenta con la inscripción de los fonavistas y la precandidatura de Sergio Tejada. Asimismo, este mosaico incluye el lanzamiento a presidente de Vladimir Cerrón de Junín, quien anuncia la inscripción de su movimiento político. ¿Cómo entender este variopinto panorama?

Para empezar, sería positivo que las elecciones internas logren atraer a sectores ciudadanos interesados en una política de izquierdas y que no militan ni constituyen la periferia de los partidos actuales. Así tienen sentido estas justas primarias y pueden inclinar la balanza en pro de una recuperación del peso electoral de la izquierda.

Por su lado, estas competencias pueden ser una ocasión para el encuentro de las militancias. Si los simpatizantes de Únete votan en las internas del FA y viceversa, las bases habrán dado un paso adelante en procura de la unidad. Se habrán puesto delante de sus dirigencias y tomarán en sus manos la resolución práctica de la unidad de las izquierdas. Además, dentro de cada tienda, ese voto cruzado ayudaría a ganar a quienes propenden a la unidad y están dispuestos a ir más allá de la respectiva capilla. De ese modo, las bases pueden cortar el nudo gordiano.

Pero, se presentan situaciones inéditas que veremos si se pueden resolver. Una primera es la relación entre propiedad de la inscripción y candidatura presidencial. En concreto, qué ha de ocurrir si en el FA pierde Arana y en Únete también pierde Nano Guerra García, el actual candidato de Yehude. Como sabemos, los dueños de la inscripción ante el JNE son Tierra y Libertad y el Partido Humanista respectivamente.

¿Estarán dispuestos a permitir que otros encabecen una fórmula con su inscripción? Es una situación única, porque nunca antes se ha visto. Normalmente las coaliciones se forman alrededor de quien tiene inscripción y candidatura, pero no hay experiencia como la que podría enfrentar la izquierda en esta ocasión.

Para dejar una candidatura siendo dueño de la inscripción se requiere grandeza y amplio horizonte de miras. Si lo hacen mostrarían que efectivamente algo importante ha cambiado y para bien.

Por otro lado, ambos dueños de inscripción son los polos de la contradicción dentro de las izquierdas. Tierra y Libertad se niega a contemplar una alianza que incluya a Yehude y éste responde de la misma manera, buscando aislar y no aglutinar al FA. Entonces, en el camino a la unidad hay un segundo punto crucial, ¿cómo superar el doble veto?

Aunque imprescindible, se ve difícil. No se trata de conveniencias, porque es obvio que la racionalidad va en esa dirección. Todos ganarían con una unidad sin exclusiones, porque podrían entrar al Congreso, que en el fondo es lo que desean. Por ello, el problema está más allá de la razón y su causa son los agravios.

Si se escucha a Yehude se descubre que está ofendido porque le dicen “señor del baguazo”, utilizando la expresión de Urresti para Alan García. A la vez, Arana ha sido ninguneado por los sabios de la izquierda y ha respondido montando un partido a partir de la demanda ecológica.

Solo los dirigentes actuales pueden resolver este punto. Pero, si de algo sirve la reflexión de Maquiavelo, ella muestra que la estatura de un liderazgo deriva del tamaño de sus enemigos. Cuando están dentro, no se pasa de un estrecho círculo de seguidores. Por el contrario, el poder obliga a tolerar a los rivales internos y enfrentar a los jefes de las formaciones enemigas. Caso contrario, seguiremos en pañales.


Fuente: La República

jueves, 17 de septiembre de 2015

Tinkuy 2015: Diálogo de saberes

¿SERÁ ÉSTE EL ÚLTIMO TINKUY?

Escribe: Wilfredo Ardito Vega

En estos días, 148 niños de sexto grado de primaria están viviendo una experiencia que marcará sus vidas.  Ellos pertenecen a diecisiete pueblos indígenas y junto con tres delegaciones de niños afroperuanos y dos grupos de niños de habla castellana de Piura y La Libertad están participando en el Tinkuy o encuentro de saberes, que organiza el Ministerio de Educación.  

Para todos los pequeños participantes, el Tinkuy es una experiencia vital y por momentos abrumadora de conocer otros idiomas y culturas.  Los primeros momentos son naturalmente de  desconcierto e incertidumbre frente a lo desconocido, pero luego van surgiendo lazos de amistad y compañerismo.      

Creo que muchos adultos peruanos necesitaríamos participar en un Tinkuy similar, donde pudiéramos intercambiar ideas y experiencias con aquellos compatriotas que nunca vemos en nuestra vida cotidiana y respecto a los cuales, a veces, solamente existen estereotipos y prejuicios.  Ayudaría mucho a comprender mejor el país y a reconocer que nuestra cultura y nuestro idioma son solamente uno en un país tan diverso. 

Por ahora, los únicos adultos que tienen esta experiencia privilegiada son los profesores bilingües que acompañan a los escolares. Algunos de ellos, como los que vienen de comunidades secoyas o ikitus han tenido que viajar varios días para llegar hasta Iquitos y tomar un avión hasta Lima. 

Como en años anteriores, los niños amazónicos, andinos y afroperuanos participarán en sesiones en Huampaní y compartirán sus experiencias en diferentes colegios nacionales y particulares de Lima.  También visitarán la playa, el Palacio de Gobierno y el Parque de las Aguas.  

Quizás, ocupados normalmente en dar malas noticias, los medios de comunicación decidan difundir el encuentro y de esta manera más gente conocerá su experiencia.  Sería bueno, también, que difundieran que en los últimos cuatro años, el Ministerio de Educación ha realizado una labor extraordinaria en materia de educación bilingüe intercultural.   Se han elaborado millares de materiales educativos en idiomas indígenas.   Hasta el año pasado, eran libros de lectura o matemática destinados a primaria, pero ya se empezaron a elaborar para colegios secundarios.   Para todo ello, el Ministerio también promueve la estandarización y oficialización de los alfabetos indígenas en coordinación con los diferentes pueblos.   Se ha elaborado también una serie de libros sobre cultura afroperuana. 

De la misma forma, en los institutos pedagógicos bilingües, cerrados durante el gobierno de Alan García, centenares de jóvenes se preparan para ser los nuevos profesores bilingües de sus comunidades.

El MINEDU no es lo único sector del Estado que ha venido haciendo esta labor: el Ministerio de Inclusión Social, MIDIS, le da especial énfasis a los materiales en idiomas indígenas dirigidos a los padres de familia cuyos hijos participan en programas como Qali Warma y Cunamás.

Otro programa del MIDIS que aborda esta problemática es Pensión 65, a través del proyecto  Saberes Productivos, que incentiva a los adultos mayores para compartir sus conocimientos ancestrales con niños y jóvenes.   Muchos beneficiarios de Pensión 65 ahora difunden idiomas que parecían en peligro de extinción, como el jaqaru y el kukama (cocama).  Ayer mismo se realizó una reunión en Sepahua (Ucayali) para promover el uso de los idiomas que se hablan en dicha comunidad: yine, nahua, matsiguenga, asháninka, amahuaca y yaminahua (Sepahua es una comunidad particular, donde se hablan todos esos idiomas).

Por su parte, el Ministerio de Cultura ha organizado ya ocho cursos para intérpretes y traductores de idiomas indígenas.  El último, que concluyó hace unos días en Quillabamba (Cusco), estuvo dedicado especialmente a aquellos participantes que podían tener más dificultades para viajar a Lima.  Hace un mes, además, el Ministerio creó el Registro Nacional de Intérpretes y Traductores de Lenguas Indígenas u Originarias.

Paralelamente, otras instituciones también se ocupan del tema lingüístico: RENIEC viene emitiendo actas de nacimiento, matrimonio y defunción en jaqaru y awajún y ha publicado tesauros (listados de nombres) en esos idiomas y en quechua.   Está pensando también elaborar un manual especial para la atención del público en diferentes idiomas indígenas como los que ya existen para la Policía Nacional y el Poder Judicial.

Pese a todos estos avances, aún estamos lejos de otros países que reconocen ampliamente su diversidad lingüística.  En Bolivia, miles de funcionarios han aprendido quechua o aymara en los últimos meses, en cumplimiento de las normas estatales.  La televisión privada boliviana tiene noticieros en ambos idiomas, que muestran la problemática nacional e internacional.  En el Ecuador, la página oficial de noticias del gobierno está en castellano y quichua. 

El lunes 21 podrán ver a los niños del Tinkuy en el Campo de Marte, para la feria abierta al público que se realizará.  Les recomiendo asistir, porque no se sabe si estas actividades se realizarán el próximo año, cuando exista un nuevo gobierno y quizás el Ministerio de Educación tenga otra orientación.  

Esperemos que sí, y mas bien el Estado asuma el reto de buscar más Tinkuys en nuestra sociedad.   La mayoría de adultos peruanos lo necesitan.


martes, 1 de septiembre de 2015

¿Es Venezuela una democracia?

¿Es Venezuela una democracia? La democracia es un concepto amplio, por ende, marcado por la subjetividad de los distintos puntos de vista y posiciones ideológicas. No se restringe sólo a elecciones nacionales y locales “libres y transparentes”. Abarca sobre todo un respeto irrestricto hacia los derechos humanos, libertad de oposición, respeto a la libertad de prensa, todos estos indicadores son factibles de medirse al menos de forma gradual. Un respeto por las reglas, más aún tratándose de Venezuela, cuyo régimen sigue una línea de izquierda y vive en constante conflictividad política, permite que un país evolucione hacia un horizonte más pacifico y de mayor gobernabilidad. Actualmente, Venezuela atraviesa una grave crisis económica y social que pone en duda la continuación de su modelo económico, la poca transparencia de su mandato, el respeto por los derechos humanos y las garantías contra opositores a su gobierno procesados, en suma su institucionalidad democrática. La población mayoritaria que es la más perjudicada será la que apruebe a o desapruebe el régimen con su voto. A propósito del debate que se ha generado en nuestro país debido a que se le preguntó a Verónica Mendoza, precandidata presidencial de izquierda, si consideraba que Venezuela es o no una democracia y su respuesta ambigua, se debería recordar que, a inicios del 2014, cuando las protestas sociales en contra del régimen venezolano llegaron a puntos muy altos de violencia, se exigió una toma de posición tajante al Presidente de la República, el cual nunca hubo. En este contexto, el internacionalista Farid Kahhat nos presenta en su programa semanal TV PUCP INTERNACIONAL una explicación clara sobre el régimen democrático en Venezuela haciendo un paralelo con nuestro país, ambos firmantes de la Carta Democrática Interamericana, que es el documento de mayor compromiso democrático a nivel internacional. Asimismo, propone un análisis crítico del desenvolvimiento democrático en otros países de la región y de Europa, mostrando así que más allá de la importancia de cumplir con los requisitos de una democracia real hay un trasfondo político que oculta prácticas antidemocráticas sucesivas, al mismo tiempo que utilizan el discurso democrático para criticar con quiénes discrepan ideológicamente. Fuente: Asociación Civil Internacia